sábado, 21 de abril de 2012

LA PESCA DEL REO: UN ENFOQUE DIFERENTE.

Bueno, pues como debido al exceso de horario en el trabajo me he retrasado con la serie de pequeños artículos que quería ir publicando a lo largo de este 2012, y teniendo en cuenta las fechas que se aproximan, no creo que pase nada por invertir un poco el orden. Así pues, vamos a meternos en la semana y media que queda de mes con los reos.

Ante todo decir que procuraré evitar los tópicos con los que año tras año nos bombardean todas las publicaciones del sector cuando se aproxima el mes de mayo o ya entrado junio. Efectivamente todos sabemos que las hormigas, las red tag, los dípteros negros o los tricópteros de León funcionan estupendamente; que la presentación mas favorable a menudo suele producirse lanzando en diagonal y aguas abajo para que lo primero que el pez vea sea la mosca; que los saltos en ocasiones son espectaculares; que la pelea del pez es una maravilla; que los bajos de línea largos benefician nuestras carencias lanzando; que el tamaño medio ha disminuído una barbaridad los últimos diez años; que el conocimiento del medio es importantísimo... Pues ya está bien, no hace falta insistir más en ello.

Así pues, vamos a intentar abrirnos nuevas puertas y que esos momentos de actividad nula en los que los peces parecen una piedra más del fondo no sean tan imposibles como habitualmente son.

- Gurglers, poppers, muddlers.

O lo que es lo mismo, "el risco en la pesca con mosca". Me explico. Yo soy de la parte más occidental de Asturias, por lo que todos los sistemas y técnicas de pesca habituales de Galicia, sea en rio o en mar, no me resultan en absoluto extraños. Así que lo que comenzó como un experimento en esos momentos de aburrimiento con ninguna actividad por parte de los peces hace unos diez años, se convirtió después en una ténica aprovechable en determinados momentos.

Además, ¿quién no ha tenido un brutal ataque al final de la deriva cuando nuestro tricóptero raya la superficie del agua al disponernos ya a levantar la línea para efectuar un nuevo lance? Pues combinando ambas cosas resultó que montar algún pequeño gurgler, popper o muddler y chapotear con ellos en alguna zona que sabíamos que había reos daba unos resultados aceptables.

Para ser sincero, las primeras pruebas las realicé al anochecer, que es lo habitual en la pesca con risco; y como todos sabemos que los serenos ya no son lo que eran había que intentar aprovechar el viaje hasta el rio.

No conservo la primera mosca que utilicé para intentar conseguir las primeras picadas (que no capturas), pero recuerdo perfectamente cual fue. Se trataba de un Goddard caddis en un #14. La idea de intentar hacer algo parecido a un risco para pescar con mosca llevaba tiempo revoloteándome la cabeza, así que como aquella mosca era lo mas parecido que tenía en la caja ni lo dudé. Con mas fe que confianza empecé a lanzar unos 45º aguas abajo y sin tener ni idea de si sería mas apropiado recoger con rápidos y cortos tirones, hacerla rayar de manera pausada y uniforme o combinar ambas formas. El caso es que tras varios lances y cuando empezaba a creer que mejor me habría estado quieto apareció una boca con un chapoteo enorme que me hizo alzar la caña casi instintivamente y el ruido del nylon rompiéndose casi llenó todo el río (razón por la cual no conservo la mosca).

De aquí salieron las primeras conclusiones: 1) cuidadito al clavar; 2) parecía que el mejor momento para producirse la picada era aquel en que la línea perdía su curvatura y comenzaba a tirar de la mosca produciendo un rayado no muy escandaloso; 3) no bajar del 0/16 o 0/18 y muy buenos nudos.

A partir de aquí ya me decidí a montar moscas específicas para semejantes experimentos, así que al día siguiente me llevé un par de gurglers y dos mini-poppers en ciervo. Y el resto del verano seguí con los experimentos con esos dos modelos de moscas. Aun así no conseguí encontrar ninguna relación fiable entre modelo de mosca, tipo de línea y bajo, velocidad y forma de recogida y número de picadas. Y la mayor dificultad fue aprender a no clavar, porque irremediablemente, y por muy cuidadosos que seamos, la rotura está casi asegurada. Recomiendo una progresiva tracción de la línea sin apenas mover la caña para simplemente asegurarnos de que el pez se ha prendido en el anzuelo.

Fueron los dos años siguientes cuando el sistema empezó a darme resultados más o menos fiables, que esto cuando de reos se trata siempre es mucho decir, y acabé por tener al menos una mosca estándar y sabiendo qué tipo de recogida, qué línea, en qué zonas, etc. utilizarla.

El anochecer de los días que no había actividad fue siempre el mejor momento. Con preferencia cerca de las orillas con cierta profundidad y refugios cercanos, bien en el cortado de la propia orilla o con algún tipo de vegetación que les haga sentirse seguros. El modelo definitivo de mosca que me dio los mejores resultados fue un muddler minnow con una línea transparente intermedia del #6 y un bajo de línea de unos 350 cm terminado en un 0/16. Lanzando aguas abajo, dejando la mosca en deriva muerta profundizar muy lentamente y cuando vemos que la línea empieza a extenderse comenzar con tirones mantenidos, no muy cortos, y alternando la velocidad de la recogida. Y así, como cuando pescamos con cucharilla, la mayoría de las picadas tenían lugar al poco de empezar la recogida. Como muchos os habréis planteado al llegar aquí, yo también pensé ¿y por qué no lanzar directamente aguas abajo y empezar a recoger de inmediato en el lugar donde se producen normalmente las picadas? Pues no me dio buen resultado, lo que achaqué rápidamente a la nula profundización del muddler si lo hacía de esta manera y decidí sustituir la línea intermedia por una teeny 200. Pero no, no se trataba de eso, sinceramente desconozco el motivo, pero con la línea intermedia y el muddler los resultados son aceptables, como para que merzca la pena escribir estos párrafos; pero con poppers, gurglers, con la teeny o variando el sistema, no vamos más allá de un simple divertimento que nos puede proporcionar alguna captura esporádica (lo que tampoco está nada mal si tenemos en cuenta que todo el tiempo hemos estado hablando de momentos de nula actividad).

En cuanto pueda robar otra media hora a mis habituales quehaceres nos meteremos con los streamers, que esto sí que puede depararnos sorpresas, y gordas!!!

domingo, 15 de abril de 2012

PESCANDO A SECA A PEZ VISTO: cebadas e imitaciones.

Pues bueno, hoy que saco un huequecito de tiempo libre voy a intentar recuperar parte de la actividad perdida por aquí para ir poniendo esto al día.


De todos modos, como el rato que he robado no es muy grande intentaré ser lo más conciso, breve y claro posible. Y que conste que esto son unas mínimas directrices que yo intento seguir para simplificarme las cosas a mí mismo, pero que nadie lo tome como unas reglas fijas y seguras ni mucho menos como el único camino a seguir.


Transcribo ahora unas líneas de la anterior entrada para añadir bajo cada párrafo el tipo de imitación que yo elijo ante cada una de estas circunstancias:


Cebada de lomo: es una cebada suave que suele darse en aguas lentas y generalmente se relaciona con insectos que emergen lentamente. Cuando el pez asoma la cabeza rompiendo la película superficial suele estar alimentándose de insectos que derivan sobre la superficie del agua y en el caso de que no veamos la cabeza lo habitual es que se esté alimentando de insectos que están justo bajo la superficie.



Cebada de sorbo: solo asoma el hocico del pez. Como en el caso anterior suele estar asociada a insectos que emergen lentamente y dependiendo de la frecuencia de las cebadas podemos establecer la siguiente relación: cuanto mayor sea el número de cebadas más pequeño será el tamaño de los insectos y viceversa.


Cebada "fantasma": por llamarla de alguna manera... Es aquella en la que solo vemos un abultamiento del agua o como se forma una burbuja en la superficie del agua pero en ningún momento vemos al pez. Suele tratarse de peces comiendo a escasos centímetros por debajo de la superficie.


Cebadas fuertes: yo suelo despreciarlas sistemáticamente. Todas aquellas cebadas escandalosas en forma de borbotones, chapoteos, etc. suelen estar provocadas por peces pequeños y muy pequeños que se alimentan confiada y tranquilamente. Como veremos más adelante, si estamos pescando a pez visto, deberemos despreciar los peces pequeños si queremos conseguir una buena captura (y esto es lo que queremos).
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Los clásicos como las Klinkhammer, rs2 o las emergentes de LaFontaine, tanto las sparkle pupa como la halo mayfly, pueden servirnos perfectamente de manera genérica o para situaciones más concretas.
De todos modos la idea general de estas pequeñas reflexiones es que tanto el nivel de flotabilidad como la movilidad de la imitación va a ser mucho más importante que el color. Y en caso de duda, oreja de liebre y a correr.

lunes, 9 de abril de 2012

Amor a primera vista

Bueno, antes de nada decir que tengo una montaña de trabajo constante y de ahí que tenga esto algo abandonado. Espero poderlo solucionar pronto e ir subiendo todo lo que tengo atrasado, que está solo pendiente de revisión y fotos...

Mientras tanto os dejo un video de una de las "actualizaciones" de un clásico más perfecta que he visto nunca. Ya sé que con que voy a rellenar este año la caja de las moscas pequeñitas, muchas f-fly y muchas como la del video, matt's gnat, bautizada está.

Lástima que en el video no dejen constancia de quién fue el montador al que se le ocurrió tal combinación, seguramente nunca llegue a leer esta entrada, pero no está de más reconocer los méritos ajenos siempre que sea posible. Es fácil suponer que fue Matt, pero...